El río del pensamiento corre, no hay porqué detenerlo. No hay culpa, cuando se habla, cuando se piensa o se hace...pero hay conciencia, que va dándose cuenta y rectificando lo que haga falta en el camino.
Hacer juicios es una pérdida de tiempo, la perfección del desarrollo de la realidad, nos pide que abramos las alas y nos dejemos llevar por el orden sincrónico del tiempo donde si no nos complicamos enjuiciando, prejuiciando o atandonos a pensamientos ajenos, el arte toma el mando y genera un desarrollo armónico de sucesos perfectos.
Abrir las alas y dejárse llevar, mirar la realidad desde su orden perfecto y unificarla a otras realidades perfectas...simplificar y alivianar las cosas, entregar todo al universo para que este se haga cargo de todo lo que no podemos entender o resolver.
Justo ahí donde todo está bien...justo ahí...todo está bien. Donde estamos seguros y alegres. Las viejas energías ya no encajan con nuestras nuevas frecuencias...y justo ahí donde todo está bien, está la inspiración...el sombrero de mago de donde salen conejos y palomas...flores y monedas, donde sale todo desde dentro...toda esa sabiduría innegable que nos afianza en las esencias que brotan de nuestra conexión con la fuente.
Se considera loco a alguien que habla de algo que no puede comprobarse, por estar ¨solo¨ percibiendo una realidad diferente a los parámetros de la ¨normalidad¨. Deja de ser loco cuando hay una persona más percibiendo lo mismo, se convierte en una realidad unificada que comprueba una verdad. Estamos a un paso de lograr una gran realidad unificada.
Cada trabajador de la luz está vivenciando un proceso de preparación, para cohabitar dentro de nuevos espacios de la realidad, se abren escenarios de nuevas artes, espacios mentales de expresión donde la realidad se unifica. Estos espacios son telepáticos y tienen que estar limpios, libres de cargas energéticas viejas e innecesarias. Es el espacio de la realidad perfecta y unificada.
La limpieza de estos campos implica un encuentro con nuestros fantasmas y temores, con experiencias místicas y paranomales ,períodos de preparación, para luego poder movernos interdimensionalmente, luego de una saturación religiosa, ya desde un punto de vista científico, de respuestas coherentes que son generadas de las experiencias ascencionales vividas una y otra vez.
Somos puntos de luz, que transmitimos información a nuestro entorno, de repente dejamos de ser locos, y nos convertimos en cohabitantes de una gran realidad unificada, representantes de las diversas metáfisicas, ciencias y artes que cantan la gran canción universal que no tiene contradicción.
Saludos ecuatoriales y cálidos,
Maga Resonante Blanca
MI AMOR VIVE CON VOS